VII Jornada de Educación Social «Yo no soy racista, pero…»

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La VII Jornada de Educación Social de la UOC tiene por objetivo plantear a las profesiones del campo social (Educación Social, Trabajo Social, Psicología Social) la siguiente problemática específica: 

¿Qué hacer frente a las formas de racismo que atraviesan actualmente los contextos profesionales, institucionales y comunitarios en que tiene lugar la acción social y educativa? 

Para su abordaje proponemos recorrer una serie de perspectivas teórico políticas específicas: 

    a. ¿Qué herramientas pueden aportarnos las perspectivas de los feminismos antirracistas para abordar esta cuestión?

    b. El marco analítico del racismo institucional: una comprensión más allá del prejuicio y el estereotipo en la producción de la desigualdad

 

1. Racismo institucional, control y gobierno de lo social

Con frecuencia el racismo suele ser reducido a una cuestión moral de mera apreciación o discriminación basada en creencias. De esta manera, se le entiende y visibiliza únicamente en sus manifestaciones como prejuicios o estereotipos culturales. Es necesario entender que al conceptualizarlo de esta manera, de facto, invisibilizamos el hecho de que el racismo constituye todo un régimen económico y geopolítico de fronteras, de producción y explotación, que opera asignando distintos grados de ciudadanía a las personas en función de su posición en las estructuras sociales globales raciales, clasistas y sexistas.

En este marco, las jornadas proponen como punto de partida la noción de ‘racismo institucional’. Este concepto es clave para entender cómo el racismo opera en tanto sistema económico y político que divide a los sujetos en tanto ciudadanos ‘de derecho’ o ‘sin derechos’ (legales e ilegales). Y a la vez, permite visibilizar ordenamientos institucionales y de la política pública que – en el diseño mismo de sus funciones, encargos y criterios de acceso – genera efectos de exclusión, criminalización y diferenciación racial. 

La mesa inaugural introducirá un análisis desde la perspectiva de las políticas públicas para señalar diversas formas de exclusión racial que forman parte del régimen de fronteras internas: prohibición del acceso a las ayudas, laberintos burocráticos, sospecha y dispositivos de control, sanción en los servicios sociales. A la vez, se propone una interpelación desde la perspectiva de la acción profesional, problematizando prácticas de arbitrariedad estructural. A través del marco que nos ofrece el análisis del racismo institucional, discutiremos los significados que se otorgan a la diversidad socio-cultural y cómo éstos influyen en el diseño de las políticas sociales y en las visiones e intervenciones de las y los profesionales del campo social (educador*s, psicólog*s y trabajador*s sociales). 

Para ello problematizaremos cómo estos imaginarios y discursos en ocasiones son transformados en las prácticas profesionales sociales y educativas, en forma de culturalismo etnocéntrico (categorizaciones impuestas esencializadoras), racismo cultural y sociocentrismo (acciones que racializan las diferencias culturales reduciendo la complejidad de las personas a una categoría única) o estética intercultural (celebración superficial de la diversidad cultural, vinculada al exotismo colonial y la exotización identitaria).

 

2. Experiencias situadas y herramientas críticas desde los feminismos antirracistas para la acción social

Conceptos como “multiculturalidad”, “interculturalidad”, u otros incorporados particularmente en las políticas de género como “interseccionalidad” o “empoderamiento”, funcionan actualmente en tanto paradigmas normativos que orientan la acción en el campo de la migración y la diversidad racial. Pese a que estos modelos suelen ser defendidos por su voluntad inclusiva y de compromiso social, las ponencias a lo largo de las jornadas proponen recuperar cada uno de estos términos para abrir un espacio pausado y crítico respecto a los actuales usos de estas nociones. 

Para ello, desde diferentes experiencias situadas en el campo profesional y particularmente desde las herramientas conceptuales y de acción política de los feminismos antirracistas, analizaremos cómo las profesiones del campo social actualmente son asignadas a labores cada vez más vinculadas al control social, la vigilancia y el disciplinamiento, en el marco de este gobierno racial. Y en la búsqueda de estrategias emancipadoras, exploraremos miradas alternativas que pongan en el  centro el compromiso profesional con la transformación y la justicia social.