¿Qué significa envejecer en comunidad desde una perspectiva interseccional?
La presente tesis parte de la Gerontología Crítica Feminista (Calasanti, 2010; Calasanti, Slevin y King, 2006; Garner, 2000; Ramos, 2017; Ray y Fino, 2008; Twigg y Martin, 2014), que subraya la necesidad de llevar a cabo investigaciones que incorporen en su diseño un análisis interseccional y de las cuestiones relativas al curso vital, por no seguir produciendo y perpetuando desigualdades; así como la importancia de teorizar las relaciones de edad y colocar la edad avanzada en el centro del análisis, entendiendo que las relaciones de edad representan un lugar político que necesita ser abordado. Desde esta mirada, este estudio se aproxima a las experiencias de envejecimiento, sus diversidades y las prácticas de curas a diferentes viviendas comunitarias para personas mayores de 65 años, para comprender el nexo entre envejecimiento y desigualdades en las prácticas de cuidar y ser cuidada entre personas grandes.
Se toma el concepto de interseccionalidad planteado por Kimberlé Crenshaw (1989) para tratar de explicar cómo las desigualdades no se multiplican con la edad, sino que se alteran de maneras más complejas, y como las definiciones de las relaciones sociales y de apoyo y la vivencia del propio proceso de envejecimiento está influido y es diferente según las diferentes posiciones sociales; las cuales son a menudo invisibilizadas en las investigaciones gerontológicas. Partiendo de estas premisas, se pretende explorar cómo es negociado y experimentado el envejecimiento en viviendas sociales públicas de la ciudad de Barcelona desde la intersección de diferentes posiciones sociales para comprender como se configuran en espacios comunitarios concretos. Además, se pretende analizar como los propios espacios reproducen ciertas estructuras que afectan estas posiciones, qué imaginarios de envejecimiento y de comunidad están inscritos en el diseño y en las normativas de estas infraestructuras y como esto, a su vez, modula las posibilidades y concepciones que se acaban configurando entre las personas que habitan, facilitando una inclusión o exclusión en sus prácticas cotidianas.
A través de una metodología cualitativa, el presente estudio se interroga sobre: ¿Qué significa envejecer en comunidad desde una perspectiva interseccional? ¿Cómo impacta la transición de vivir en una comunidad segregada por razón de edad a la percepción del propio envejecimiento? ¿Cómo influyen el género, la sexualidad y la etnia en la definición de las relaciones en la vejez y, en particular, en las relaciones de apoyo y de cura? ¿Y en la propia vivencia y significación del proceso de envejecimiento? ¿Cómo dialogan y están en relación (o tensión) la concepción de la vejez de las participantes y de la propia equipación donde viven?
En un sentido general, esta investigación aportará nuevos análisis sobre como gestionar las curas y las diversidades del envejecimiento, poniéndolas en valor, y contribuirá a conocer qué aspectos contribuyen a fomentar los vínculos y la inclusión de la diversidad a los espacios donde viven. Así pues, este conocimiento se podrá aplicar a los proyectos estudiados y en otros de asimilables para crear equipaciones comunitarias más inclusivos y participativos, donde la vida y el bienestar de las personas esté en el centro. El estudio servirá así de inspiración para la planificación de futuras viviendas comunitarias y para mejorar los existentes, llenando un vacío en la literatura previa sobre esta tipología de vivienda en nuestro territorio.